TU NO ESTAS SOLO EN ESTE MUNDO si te ha gustado algun artículo , compártelo, envialo a las Redes sociales, Twitter, Facebook, : Compartamos el conocimiento

martes, mayo 02, 2006

NEUS SIEMPRE NOS INFORMA DE CUESTIONES RELEVANTES Y BIEN PLANTEADAS.SIGAMOS CON NEUS

LA ECONOMÍA DE LA AUTONOMÍA

 

En el sector de la comunicación y la creatividad coexisten dos tendencias: la externalización y la internalización. Ambas muestran nuevos modos de perseguir la eficiencia económica. Ambas necesitan ser divulgadas para que adquieran mayor visibilidad social.

 

La revolución digital de los noventa generó dos fenómenos que convergieron en una nueva forma de trabajar: la empresa en red.  Por un lado, las puntocom fueron fuente de múltiples ideas de negocio. Por otro, la tecnología permitió una mejor conexión entre los intervinientes en un proyecto.

 

La externalización
La burbuja estalló pero la metodología del trabajo en red no desapareció: habíamos descubierto las ventajas de externalizar los procesos que no forman parte de nuestro núcleo duro de competencias. En Manfatta, por ejemplo, producimos webs, pero no las diseñamos. ¿Para qué limitarnos a un diseñador/a en plantilla teniendo acceso a un pool de talento? Preferimos llegar a acuerdos de colaboración con profesionales del diseño. Ellos, a su vez, externalizan las tareas que no son su fuerte. En este mercado en red, unas veces eres proveedor y otras cliente. Esta posición cambiante te permite entender lo que supone estar liderando un proyecto/integrando un equipo.

 

La externalización permite una mejor identificaron de perfiles y un ahorro de costes: 1. se acaba el proyecto y se desmonta el equipo; 2. la figura del coordinador se limita al proyecto (vs el ejecutivo de cuentas en permanencia). Los clientes finales disponen del mejor talento al mejor precio.

 

A pesar de su eficiencia económica, esta metodología es aún minoritaria y no encaja en los patrones tradicionales. Otro ejemplo. El año pasado fui finalista al Premio a la Mujer Emprendedora que concede el Ayuntamiento de Barcelona. Entre las informaciones que debía aportar se incluían la facturación y el número de empleados. Las bases del premio no recogían la facturación indirecta o el total de puestos de trabajo generados en base a los proyectos externalizados, es decir, los ingresos generados en red.

 

La medición de la creación de valor indirecta es necesaria para que una sociedad que se dice innovadora lo sea realmente. ¿Cómo computamos sino la creatividad? ¿Cómo la hacemos visible? Mi empresa, fundada como suministradora de contenidos digitales, se clasifica bajo el epígrafe fiscal “Servicios a empresas: otros” por falta de mejor ubicación. Ese mismo epígrafe ampara a las empresas de limpieza de oficinas. Estas dos actividades diferentes se suman a la hora de elaborar estadísticas e informes económicos, con lo que resulta difícil valorar la aportación del sector creativo al PIB. Y sería importante que se valorara: las múltiples iniciativas sociales de promoción de la innovación deberían llevar aparejadas herramientas de medición de resultados. Sólo si somos responsables (en el sentido del término “accountable”) de los recursos invertidos podremos ser vistos como un sector estratégico para el conjunto de la economía.

 

La internalización
Frente a la dinámica centrífuga de la externalización observamos otro fenómeno incipiente: la internalización. En aquellos sectores en los que las nuevas tecnologías están reconfigurando las reglas del juego, y singularmente en el mercado discográfico, empezamos a ver como cada vez más artistas optan por internalizar sus proyectos: su capacidad de gestión y control de la propia obra se incrementa.

 

Esta tendencia se da en dos niveles. Por un lado, Internet proporciona a los creadores inéditos mayor facilidad para difundir sus obras: desde editar su propio disco a pasar un vídeo o editar una novela.

 

Por otro, los creadores “establecidos” no se limitan a ceder los derechos sobre su obra para que un tercero los explote: entran en acuerdos de coproducción o, directamente, de autogestión. ¿Qué tienen en común Pedro Almodóvar, Mel C. (de las Spice Girls), Loquillo o Prince? Respuesta: hoy todos ellos, en mayor o menor medida, se coproducen/autoproducen.

 

Aún es pronto para dibujar los nuevos escenarios en que se desenvolverán sectores maduros como el editorial y el discográfico. Sin embargo, parece posible aventurar que estas nuevas tendencias están aquí para quedarse.

 

Esta conversación continua en nuestro blog o en mi email. La gazetta vuelve el 15 de mayo. Hasta entonces.
 

Neus

Es interesante seguir leyendo a Neus porque siempre trae cosas interesantes y novedosas  bajo una también especial óptica. Saludos Rodrigo González Fernandez, consultajuridica.blogspot.com

No hay comentarios.:

Publicar un comentario