| Página de        inicio  >  MEGATENDENCIAS Todos compartimos la responsabilidad de crear        un mundo sin exclusión El aumento de la discriminación social en medio        del avance tecnológico repercute en el Estado del        Bienestar 
 Los        avances tecnológicos, técnicos y sociales, han ampliado las situaciones de        exclusión social, que constituyen un agravio a la dignidad, así como una        vulneración de los derechos humanos básicos. La dimensión cobrada por la        situación actual reconduce a nuevas vías para erradicar la discriminación        social: de la asistencia médica y la caridad, hemos pasado a un modelo        social basado en los Derechos Humanos y en la igualdad de oportunidades.        También se ha fortalecido la Economía Social o Tercer Sector. La        responsabilidad social se manfiesta asimismo en las empresas. Todos        compartimos la responsabilidad de crear un mundo sin exclusión. Una tarea        en cuyo diálogo social han de participar ONGs, Empresarios, Sindicatos,        Administraciones Públicas, Pensadores, Investigadores y Universitarios y        Opinión Pública. Por Carlos Rubén Fernández        Gutiérrez. 
 
 Cuando        hace unas décadas hablábamos del año 2000 y del siglo XXI siendo algunos        todavía niños y otros jóvenes-, todos nos imaginábamos un mundo inmerso en        la más sofisticada tecnología aeroespacial, con dominio sobre otros        planetas, con un tráfico de vehículos tremendamente racionalizado,        alimentos asépticos de cultivo químico y, en definitiva, una sociedad        perfectamente integrada en el que cada uno tenía una función        asignada. 
 Pues        bien, en 2005, salvo la comida de origen químico, ninguno de estos        pronósticos se han hecho realidad todavía: vivimos en un mundo donde        diariamente asistimos a múltiples muestras de irracionalidad y en el que        los avances tecnológicos, técnicos y sociales no han hecho más que ampliar        las situaciones de exclusión social: la quinta parte de la humanidad, la        más rica, acumula hoy en torno al 85% de la riqueza mundial.
 
 Como        puso de relieve el primer "Plan Nacional para la Inclusión Social",        presentado por España a la Unión Europea en 2001, hemos asistido a la        rápida conversión de una sociedad estratificada, de una sociedad        fundamentada en una división clasista notablemente estable, a una realidad        social en la que encontramos una significativa multiplicidad de ejes de        desigualdad.
 
 Las        situaciones de riesgo se han democratizado, castigando más severamente a        los grupos de siempre, y golpeando con fuerza también a nuevas capas y        personas. En consecuencia, el panorama actual mundial y europeo recrea        nuevas situaciones de exclusión social que repercuten en el pretendido        Estado del Bienestar y que constituyen un agravio a la dignidad, así como        una vulneración de los derechos humanos básicos.
 
 Nuevas        preocupaciones
 
 Nuevas        preocupaciones, como el paro estructural de larga duración, que afecta a        mujeres, trabajadores de mayor edad, personas con discapacidad, enfermos        mentales, jóvenes que proceden del fracaso escolar, inmigrantes sin        cualificación profesional, entre otros colectivos excluidos o amenazados        de exclusión, hace que muchos trabajadores que hasta ahora creían vivir en        la seguridad laboral, empiecen a caer en renovados espacios de        pobreza.
 
 Frente        a los nuevos fenómenos de exclusión social, surge una pregunta: ¿siguen        resultando adecuadas las políticas de bienestar social tradicionales? La        respuesta es no. La dimensión cobrada por la situación actual reconduce a        nuevas vías de solución para erradicar la discriminación        social.
 
 Del        modelo contemplativo de actuación individual, basado principalmente en la        asistencia médica y la caridad que catalogaba a las personas en riesgo de        exclusión como un problema, hemos pasado a un modelo social basado en los        Derechos Humanos y en la igualdad de oportunidades.
 
 Este        último modelo, aceptado internacionalmente, no excluye la rehabilitación        ni el tratamiento médico oportunos, pero su mayor aportación es que        implica que debe ser el sistema quien se adapte a las particularidades de        sus ciudadanos y no la persona quien se adapte a la organización social        establecida.
 
 Además        de las políticas de bienestar social, es importante resaltar que la lucha        contra la exclusión social es fundamentalmente un combate por la igualdad        de derechos y la no discriminación. Discapacidad, Inmigración, Exclusión        en la población Juvenil, constituyen nuevos desafíos sociales que        desbordan el sector público y amenazan el Estado de Bienestar
 
 Tercer        Sector, una salida viable
 
 Sin        duda, parte de la respuesta vendría dada por las entidades de la Economía        Social o Tercer Sector, todo un entramado de actividades sociales que han        adquirido una trascendencia económica altamente significativa y que        presumiblemente seguirá creciendo en los años venideros.
 
 Un        conjunto de entidades que han surgido como respuesta creativa de la        sociedad ante las nuevas necesidades sociales producidas por el desarrollo        económico. Un entramado de actividades sociales que no vienen a sustituir        al sector público ni al privado, sino que lo complementan.
 
 El        campo de actuación del sector no lucrativo se extiende al empleo, los        servicios sociales, la educación y la formación para la inserción laboral,        el medio ambiente, la atención a colectivos desfavorecidos, la sanidad, el        deporte, la utilización del tiempo libre o la cultura. Es en todo ese        extenso ámbito en que la gestión solidaria y participativa puede ser una        alternativa creíble a una gestión estatal a veces menos ágil y siempre        insuficiente.
 
 Según        algunos estudios desde la década de los años 80 las entidades de la        Economía Social han sido grandes creadores de empleo. En España, el tercer        sector, es decir la suma de Asociaciones, Fundaciones, Cooperativas,        Sociedades Laborales, Mutualidades y Cajas de Ahorro agrupa al 6,5% de las        entidades presentes en España, un 7% del empleo asalariado (casi un 10% si        incluimos a los voluntarios); en definitiva, un 5% del valor añadido bruto        que se genera en nuestro país. Un sector cuya labor supondría para las        Administraciones Públicas una plantilla equivalente en torno a 1.320.000        personas.
   
 Claves        del éxito 
 La        clave del éxito de estas entidades radica en su capacidad de aunar los        valores sociales de participación, responsabilidad y solidaridad con los        de rentabilidad y eficacia empresarial, inherentes a cualquier empresa. De        hecho, muchas de las empresas que conforman el Tercer Sector sirven de        referencia a importantes grupos empresariales, por su metodología de        gestión y por sus resultados.: las entidades que conforman el Tercer        Sector representan una oportunidad excepcional para dar empleo a los        colectivos más desfavorecidos.
 
 En        contraste con los promedios nacionales de otros sectores, en la Economía        Social la estabilidad del empleo remunerado está muy por encima de los        valores medios de mercado, el empleo femenino es mayoritario y también lo        es el empleo de personas menores de 25 años. Hay una alta proporción de        trabajadores de muy alto nivel formativo y es uno de los instrumentos más        destacados a la hora de dar oportunidades laborales a las personas con        discapacidad, entre otros colectivos en riesgo de exclusión        social.
 
 Un        entramado de entidades que necesitan conseguir un mayor reconocimiento        institucional que le otorgue la interlocución y representatividad que        merece en base a su peso real en la economía, además del apoyo de la        investigación y la docencia universitaria que le corresponde.
 
 En        definitiva, el Tercer Sector se ha apuntado como una posición estratégica        para hacer factible el tránsito a un nuevo modelo de Sociedad de        Bienestar, como una vía para reconciliar la economía con la        sociedad.
 
 Corresponsabilidad        social
 
 Y        precisamente fruto de esta conciliación entre economía y sociedad, también        han irrumpido en nuestros días nuevas tendencias que, bajo el nombre de        políticas de buen gobierno y de responsabilidad corporativa, están dando        un mayor protagonismo estratégico a las políticas de acción        social.
 
 Por        primera vez, estamos asistiendo a un cambio de chip por parte del        empresario/a acerca de los principios de gestión que realmente aportan        valor añadido a su negocio. Interés colectivo, solidaridad, pluralidad y        responsabilidad son ahora valores cotizados que se suman al valor de        mercado.
 
 La        sociedad está cambiando y la empresa trata de adaptarse al ritmo que lo        hace su entorno. Las empresas más cotizadas ya no son aquellas que más        dividendos otorgan, sino aquellas que mejor visión de futuro aportan y,        qué duda cabe, que el mayor valor es aquel que se proyecta a la sociedad        encaminándola hacia un mundo mejor.
 
 Junto        con las instituciones públicas y las entidades de la economía social, la        empresa privada también está legitimada para asumir y sacar partido de        este renovado protagonismo social pero ha de hacerlo desde un enfoque        estratégico. La responsabilidad social no emana de acciones puntuales de        cara a la galería, sino de patrones asumidos en los propios principios de        gestión. La reputación corporativa se ha impuesto al servicio al cliente y        stake holders (grupos de interés) están dispuestos a destronar al mejor        comprador.
 
 Un        Siglo XXI sin exclusión social
 
 En        suma, la contienda contra la exclusión social no exime a ningún ciudadano        y ciudadana del mundo. De alguna u otra manera, todos compartimos la        responsabilidad de crear un mundo sin exclusión. Una tarea en cuyo diálogo        social han de participar ONGs, Empresarios, Sindicatos, Administraciones        Públicas, Pensadores, Investigadores y Universitarios y Opinión        Pública.
 
 Y        ya para terminar me gustaría concluir citando a uno de los símbolos vivos        de la lucha mundial contra la exclusión mundial, el irreductible y tenaz        Nelson Mandela, Premio Nobel de la Paz y Premio Príncipe de Asturias a la        Cooperación Internacional. Como él decía y también nos ha enseñado a lo        largo de su difícil vida, "no podrás encontrar ninguna pasión si te        conformas con una vida inferior a la que eres capaz de vivir".
 
 Busquemos        esa pasión y hagámosla realidad. Imaginemos un mundo sin barreras, una        sociedad justa en la que todos los ciudadanos y ciudadanas participemos en        igualdad de oportunidades. En definitiva, construyamos un siglo XXI sin        exclusión.
 
 
 
 
 Carlos        Rubén Fernández Gutierrez, Informático y Master en Gestión y Dirección de        Empresas, es Presidente de la Fundación        ONCE y        del Grupo Fundosa, así como Secretario General del Comité Español de        Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI), Vicepresidente de la        Confederación Empresarial Española de Economía Social (CEPES) y        Vicepresidente de la Plataforma de ONGs de Acción Social. El texto de este        artículo, que se reproduce con autorización del autor, es un resumen de su        intervención ante el Octavo Foro sobre Tendencias Sociales que tuvo lugar        en la UNED en noviembre pasado. El texto íntegro, junto con las demás        ponencias, se ha publicado en el libro Tendencias en exclusión        social y políticas de solidaridad, editado por José Félix        Tezanos y        publicado por la Editorial Sistema.
 
 
 
 Domingo        12 Junio 2005 Carlos        Rubén Fernández Gutiérrez |  |