El post de hoy es totalmente diferente a lo que suelo publicar, pero llevaba un tiempo queriendo escribir sobre este tema porque me tiene sorprendida y decepcionada, cómo puede haber gente con tan poca empatía y tanta maldad.
Si tenéis redes sociales y de vez en cuando os leéis los comentarios de cuentas que tienen muchos seguidores seguro que habéis detectado este tipo de perfiles dañinos y carentes de educación que sólo se dedican a atacar resguardados por el anonimato que internet nos otorga hoy en día.
Yo siempre me he mantenido bastante al margen de mostrarme en mis redes sociales, mostrar mi vida personal, mi yo más íntimo, y es que aunque la mayoría de los comentarios son respetuosos y amables, hay un cierto porcentaje que va a hacer daño gratuitamente al que yo por lo menos ni estoy dispuesta ni creo que preparada para aguantar, por eso admiro a ciertos perfiles que tienen que leer tanta mierda sobre su persona sin que les conozcan, basándose principalmente en la envidia y supongo que en el aburrimiento, a mi no se me ocurre perder mi tiempo en ofender y poner comentarios que en lugar de construir, destruyen.
Creo que no se tienen claros los límites de hasta dónde podemos inmiscuirnos en la vida de los demás con nuestros comentarios. Es cierto que son personajes públicos, que muestran su vida al detalle, pero no creo que eso legitime a nadie a expresar sus pensamientos con total falta de educación y empatía, nos amparamos en la libertad de expresión, pero no nos confundamos, libertad no es atacar, ofender y vapulear a quien nos dé la gana a la vista de todos los demás.
La gota que hizo que hoy me decidiera a publicar este post fue ver el vídeo de Lizy P el otro día en su canal. Ella en Youtube muestra tutoriales de maquillaje, hauls, tags... y en alguno cometió
el error de sacar a su marido lo cual ha desencadenado un huracán de comentarios, insultos y chismes sobre su posible divorcio. Si véis
el vídeo podréis leer las lindezas que la gente ha puesto durante meses, yo desde luego no daba crédito.
Antes podíamos pensar lo que fuera del famoso de turno, pero era casi imposible que llegara a sus oídos las críticas o insultos. ahora con las redes sociales, para bien y para mal no han hecho acercarnos más a todo el mundo, a estar más conectados, y esto lo han aprovechado perfiles tóxicos para faltar e insultar sin ningún tipo de perjuicio o castigo. Normalmente son perfiles privados, sin fotos personales, con alias inventado, su anonimato les salvaguarda, y mientras tanto, los demás han de sufrir este tipo de prácticas que no son agradables para nadie.
Sólo espero que todos reflexionemos sobre esto, que detrás de un perfil social hay una persona, con familia, sentimientos e inseguridades que no tiene porqué leer ciertas cosas sobre su persona. Antes de criticar a los demás, hagamos autocrítica sobre nuestra vida, dudo que salieramos airosos de la comparación, y sobre todo usar la empatía, practicarla, entrenarla, porque con ella seguro que todo iría mucho mejor.
Por cierto, he borrado los nombres de usuario para evitar polémicas, pero puedo confirmar que el 100% de los perfiles son de mujeres, lo cual es todavía más impactante. Por lo general tenemos las cosas más difíciles en la vida, como para encima ponernos palos en las ruedas entre nosotras, es lo más lamentable de esto, cómo podemos ser tan sumamente malas y en lugar de ayudarnos, nos destruimos, sin duda es lo que más decepción me causa.
Os dejo con algunos pantallazos a modo de ejemplo que he encontrado en dos ratos de búsqueda en redes sociales. Hay que tener en cuenta que la mayoría de los comentarios son borrados por los propietarios de las cuentas, y aún así te encuentras con estas cosas, increíble.
En fin, como es muy largo, dejo para otro día la explicación de los tipos de perfil que se pueden encontrar, desde el licenciado vende consejos, al mecenas por 0€, pasando por el antipublicidad.
¿Qué os parecen estos perfiles? ¿Aguantaríais este tipo de comentarios en vuestras redes sociales?
