Ex ministro de Pinochet
Alfonso Márquez de la Plata : "Siento y veo a esta gente con un odio muy grande"
Ex colaborador del régimen militar relata los incidentes ocurridos el domingo, a las afueras del Teatro Caupolicán, y que lo tuvieron como uno de los protagonistas.
Ampliar
Fue el único ex ministro del régimen militar que asistió al homenaje a Augusto Pinochet, el domingo pasado, en el Teatro Caupolicán. Ese día, a Alfonso Márquez de la Plata -quien encabezó las carteras de Agricultura, Segpres y Trabajo- le tocó enfrentarse a un grupo de manifestantes contrarios al acto, quienes le impidieron tomar taxi, le gritaron "asesino" y le lanzaron escupos. Sin embargo, Márquez de la Plata, que el año pasado también estuvo en el polémico homenaje a Miguel Krassnoff, dice que no sintió temor y que seguirá asistiendo a actividades de estas características.
¿Qué le parecieron las protestas e incidentes del domingo?
Esto fue exactamente el mismo acto incivilizado que se produjo cuando hicimos el lanzamiento de la IV edición del libro de Miguel Krassnoff, donde también llegaron personas incivilizadas a tirar piedras, a gritar. Creo que esto es un baldón para la gente que hace esas cosas, si estamos en un país democrático. Hace pocos días, el PC realizó un acto por los 100 años en el Senado de la República y a nadie se le ocurrió molestarlos. Entonces hay libertad o no, es penoso lo que hizo esta gente, muy penoso.
¿Le pareció que la funa fue anti-democrática?
Absolutamente. Lo que ellos pretendían era impedir este acto y gracias a que Carabineros hizo una magnífica labor, eso se impidió.
Su salida del teatro fue parti-cularmente compleja. Tuvo pro-blemas cuando intentaba tomar un taxi y fue detenido por un grupo de manifestantes que lo insultó e, incluso, lo escupió. ¿Cómo vivió esos momentos?
No, si no me alcanzaron a escupir. Me tiraron barro en la cara, pero también es un acto incivilizado. Unas carabineras me dijeron que esa calle estaba despejada, entonces salí. Me acompañaron dos niñas que amablemente se ofrecieron y se unió un camarógrafo de TVN que iba filmando todo. Yo tenía que salir, y ahí lo único que hubo fue una agresión verbal, en que nos gritaban "asesinos" y todo ese tipo de cosas. Luego llegamos a Avenida Matta, donde hice parar un taxi. En ese momento, las señoras que gritaban, que no habían hecho ninguna agresión física, trataron de impedir que subiéramos y aparecieron dos carabineros que les dijeron que se retiraran. Eso fue el forcejeo que apareció en la televisión.
¿Le gritaron algo más?
Lo único que gritaban era "asesinos".
¿Qué sintió en ese momento?
Siento y veo a toda esta gente con un odio muy grande. Eso me preocupa, porque hay una sociedad envenenada contra otra parte de la sociedad y no creo que eso sea bueno para el país. Los chilenos tenemos que vivir entre todos y en paz.
¿Sintió temor?
No, nunca he sentido temor en mi vida. Cuando me dijeron que la calle estaba despejada y vi un grupo de personas al fondo, dije "estas viejitas de todas maneras son contrarias", y como iba con un señor que me estaba filmando, eso agravaba el tema. Entonces ahí comenzó la agresión física y verbal.
¿Qué les diría a esas personas que ese día lo abordaron y que quizá son familiares de detenidos desaparecidos o víctimas de viola-ciones a los derechos humanos?
Es que era una turba que estaba con instrucciones. Ninguno me dijo "oiga, mire, mi hijo fulano de tal, o mi padre tal cosa", nada.
Hay quienes argumentan que la realización de esta actividad fue una provocación...
Cómo va a ser una provocación ver una película para dar a conocer la verdad de lo que pasó en Chile. Era una obligación nuestra dar a conocer esto. Ahora, lo importante es que esto se difunda, se están haciendo DVD y ojalá esta película se ponga en internet.
¿Pensó que la realización del homenaje podía tener estas consecuencias?
Sí, esto fue lo mismo que pasó en Pocuro, exactamente lo mismo, pero, a diferencia de esa vez, se hicieron todas las gestiones: una solicitud a la intendencia y Carabineros estaba advertido.
Justamente con el antecedente de lo que ocurrió en Providencia, ¿no cree que era mejor hacer un acto de más bajo perfil?
¿Pero qué vamos a hacer? ¿Nos vamos a entregar a la fuerza bruta, que el que haga más desmanes es el que impone la verdad? Eso va contra todo sentido democrático, ellos son unos antidemócratas. En vez de razones usan los palos, esa es la esencia de la poca democracia. Así como ellos hacen sus cosas y nadie los molesta, nosotros podemos hacerlo. Se supone que es un país democrático y no creo que la democracia vaya por los palos, que para protestar vayan unos señores a intentar apalear a la gente.
¿Asistiría a otro acto de estas mismas características?
Sí, claro, de todas maneras. Pero lo que corresponde ahora es difundir la película, esa es la tarea.
Hay reconocidos partidarios de Pinochet que se restaron de asistir al acto, como Cristián Labbé. Otros incluso lo cuestionaron. ¿Qué piensa de eso?
En el caso de Labbé, él tenía un compromiso muy importante y no se le puede decir que él no apoya estas cosas. Iván Moreira siempre ha sido una persona muy derecha, y si no ha podido, debe ser por una razón personal. No entro en un análisis más allá.
¿Qué le parecieron las declaraciones de Chadwick, en las que se arrepiente de haber respaldado a un régimen en el que hubo violaciones a los derechos humanos?
Todo tiene una explicación. Hubo una verdadera guerra y se habla de la gente que murió, pero no se destaca que hubo terrorismo, que las FF.AA. tuvieron que intervenir y combatirlo, que hubo muertos por los dos lados. Si eso se le olvidó al ministro Chadwick... no sé. Encuentro lamentables las declaraciones del ministro, porque creo que estaba más informado que el grueso público de lo que realmente ocurrió en esa época. Es extraño.