Varias manifesatciones han tenido lugar en todos los rincones del mundo exigiendo medidas urgentes./ EFE
El responsable de la Conferencia de Bali sobre Cambio Climático considera que el mundo está dividido sobre la forma de reducir las emisiones con efecto invernadero y ha advertido que la gran cantidad de temas a tratar podría obstaculizar las conversaciones. Yvo de Boer, secretario ejecutivo de la Convención de la ONU sobre Cambio Climático, ha dicho, no obstante, que sigue siendo optimista sobre los resultados que saldrán de la Conferencia de Bali .
Delegados de 188 países participan en las reuniones de la conferencia, que se celebran en el complejo hotelero de Nusa Dua, para intentar alcanzar un consenso sobre diversos asuntos que van desde la deforestación hasta la reducción de las emisiones contaminantes de dióxido de carbono.
La semana entrante, los ministros de Medio Ambiente de todo el mundo se reunirán en esta conferencia para establecer las siguientes etapas con miras a un nuevo acuerdo que sustituya al actual Protocolo de Kioto después de 2012. "Estoy un poco preocupado porque habrá muchos temas en la reunión de alto nivel, los ministros tendrán mucho sobre la mesa y un tiempo muy limitado para alcanzar una conclusión", dijo Boer. "Espero realmente que para última hora del martes" haya sido posible dejar todo tratado, apuntó.
Los grandes dificultan un acuerdo
Estados Unidos y China se han convertido en los principales obstáculos para lograr un acuerdo global para la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero en la Conferencia sobre el Cambio Climático de la ONU que se celebra en Bali (Indonesia). Mientras, unas 50 ciudades de todo el mundo, entre ellas Madrid, celebran actos para reivindicar el compromiso de los líderes mundiales en la lucha contra el cambio climático.
Hasta ahora, Estados Unidos sólo ha ofrecido que autorregulará sus emisiones mediante un plan que estará terminado a mediados de 2008, según ha explicado el delegado estadounidense en la Conferencia de Bali, Harlan Watson. "No estamos dispuestos a hacerlo", ha afirmado Watson al ser preguntado sobre la posibilidad de que Washington suscriba un acuerdo global vinculante. "Estamos trabajando en ello, en cuál será nuestra contribución, y, desde luego, esperamos lograrlo antes de que finalice el proceso de las Principales Economías".
Las negociaciones que seguirán a las de Bali intentarán incorporar a China, Brasil y otras grandes economías en vías de desarrollo, todas ellas exentas de las reducciones vinculantes estipuladas en el Protocolo de Kioto, para que disminuyan sus emisiones contaminantes.
Las pequeñas potencias se niegan a reducir las emisiones
La Conferencia de la ONU sobre Cambio Climático ha cerrado su primera semana con optimismo pero sin decisiones claras y con un firme rechazo de los países en vías de desarrollo a comprometerse a reducir sus emisiones, tal como reclaman algunas naciones industrializadas. "Está muy claro que los países en vías de desarrollo no están dispuestos a aceptar objetivos de reducción de emisiones de obligado cumplimiento", ha explicado Ivo de Boer, secretario ejecutivo de la Convención Marco de la ONU sobre Cambio Climático (UNFCCC), en la que ha valorado con optimismo la marcha de la Conferencia.
Países como China y la India, a los que el Protocolo de Kioto no obligaba a reducir sus emisiones pero que en los últimos años las han incrementado enormemente y se han situado entre los principales contaminantes del planeta, no aceptarán ningún tipo de imposición en este sentido, al considerar que limitarán su crecimiento económico.
"Las partes están debatiendo fórmulas para incentivar a esos países a limitar sus emisiones", ha explicado De Boer, que se muestra partidario de que el debate de Bali no se centre sobre los límites concretos de emisiones y pide que esa cuestión se trate con más detalle dentro de dos años. "Lo importante ahora es decidir los instrumentos de que van a disponer los países para actuar en mitigación y en adaptación, y esos conocimientos permitirán luego tomar decisiones sobre objetivos que tengan sentido", ha dicho De Boer.