Los banqueros centrales contraatacan
Hablar de brotes verdes inevitablemente tempera el impacto de la crisis financiera del año pasado, cuando las más encumbradas firmas de Wall Street caían como fichas de dominó. Pero la necesidad de una reforma regulatoria concienzuda aún es urgente. Una preocupación resalta: el riesgo de que todo el sistema financiero se venga abajo, como pasó el otoño (boreal) pasado. Controlar el riesgo sistémico es la meta más importante de la reforma regulatoria, todo lo demás es secundario.
dias de brotes verdes
Aquellos que quieren dar a los bancos centrales el poder y responsabilidad de monitorear el riesgo sistémico tienen razón. Entre ellos se cuentan el Tesoro de Estados Unidos, cuyas propuestas de la semana pasada persiguen convertir a la Reserva Federal en un regulador sistémico. Mervyn King, gobernador del Banco de Inglaterra abogó por poderes similares.
Federal reserve
Estas propuestas son rebatidas. No deberían serlo, las alternativas son peores. Los miembros del Congreso estadounidense quieren que el riesgo sistémico sea supervisado por un nuevo consejo de agencias regulatorias. Pero como ha dicho Lawrence Summers, director del consejo nacional económico de Estados Unidos, la responsabilidad colectiva con frecuencia conduce a ninguna responsabilidad. Y ninguna agencia está mejor preparada para asegurar la estabilidad financiera general que un banco central con su poder de creación de liquidez. Ese, y no la política monetaria, era el propósito original de la Fed.
La solución no es perfecta: uno puede temer legítimamente que un doble mandato (política monetaria y estabilidad financiera) debilite la habilidad de realizar bien ambas. Pero estas tareas pueden ser complementarias, un exceso de liquidez puede inflar los balances tan fácilmente como los precios.
Las cosas son más complicadas en la Unión Europea, cuyos mercados financieros integrados no son igualados por autoridad fiscal o regulatoria internacional (o autoridad monetaria, fuera de la zona del euro). Lo mejor que puede esperarse es la adopción del borrador de Jacques de Larosière, que propone un consejo de riesgo sistémico para la UE con poderes de arbitraje vinculantes sobre reguladores nacionales en desacuerdo. Europa no debe seguir expuesta a la quiebra de bancos con balances más grandes que las economías de sus países de origen.
Los bancos demasiado grandes para quebrar son de verdad demasiado grandes, pero esa es sólo una fuente de riesgo sistémico. Un sistema de muchas partes pequeñas también es vulnerable al colapso, como muestra la cascada de quiebras bancarias en los '30. Puede que limitar el tamaño de los bancos, como analiza el banco central de Suiza, no evite la crisis.
Es más importante hacer posible que incluso los más grandes puedan quebrar. Un régimen especial de liquidación es una sine qua non. La sugerencia de King de exigir a los bancos elaborar planes para una liquidación ordenada es buena. Los bancos también deberían pagar por cualquier riesgo sistémico que representen - por su tamaño, sus conexiones o la naturaleza de su negocio- a través de ratios de capital más altos.
Las reformas para controlar el riesgo sistémico no deben ser presa de la política. Deben promulgarse antes de que el recuerdo del otoño pasado se desvanezca.
Fuente:
Difundan libremente este artículo
CONSULTEN, OPINEN , ESCRIBAN .
Saludos
Rodrigo González Fernández
Diplomado en "Responsabilidad Social Empresarial" de la ONU
Diplomado en "Gestión del Conocimiento" de la ONU
www.el-observatorio-politico.blogspot.com
www.lobbyingchile.blogspot.com
www.calentamientoglobalchile.blogspot.com
www.respsoem.blogspot.com
Oficina: Renato Sánchez 3586 of. 10
Teléfono: OF .02- 2451113 y 8854223- CEL: 76850061
e-mail: rogofe47@mi.cl
Santiago- Chile
Soliciten nuestros cursos de capacitación y consultoría en LIDERAZGO - GESTION DEL CONOCIMIENTO - RESPONSABILIDAD SOCIAL EMPRESARIAL LOBBY ENERGIAS RENOVABLES , asesorías a nivel nacional e internacional y están disponibles para OTEC Y OTIC en Chile
No hay comentarios.:
Publicar un comentario