Gerardo Lissardy Enviado especial a España |
El gobernante Partido Socialista Obrero Español (PSOE) de José Luis Rodríguez Zapatero, se impone en las elecciones generales de este domingo con casi el 90% de los votos escrutados.
Aunque los resultados todavía no son definitivos, el conservador Partido Popular (PP) de Mariano Rajoy, felicitó a los socialistas "por lo que parece una victoria clara" que le daba por el momento 12 escaños más en el Congreso de Diputados.
El coordinador de la campaña, Pío García Escudero, ofreció una conferencia de prensa en la sede de la agrupación, en la que al tiempo de reconocer la derrota, también subrayó que los votos también indican que es el partido que "probablemente más sube respecto a 2004".
Están en juego 350 escaños en el Congreso de Diputados y 208 en el Senado. Si el partido que resulte vencedor carece de una mayoría absoluta, deberá formar alianzas con agrupaciones menores para investir al presidente del gobierno.
En la última legislatura los socialistas tenían 164 diputados contra 148 del PP, y Zapatero asumió el poder con el apoyo de nacionalistas catalanes y vascos.
Normalidad
Las urnas cerraron a las 20:00 hora local (19:00 GMT) y todos los sondeos a boca de urna difundidos en ese momento anticipan una victoria del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) de Zapatero, con entre el 43% y el 45% de los votos.
Algunos sondeos señalan que el PSOE estaría cerca de obtener una mayoría absoluta de escaños en el Congreso de Diputados.
La jornada electoral transcurrió con normalidad, sin que se hayan registrado de incidentes significativos.
Cerca de 35 millones de españoles fueron convocados a las urnas para definir la nueva composición del Senado y el Congreso de Diputados, que investirá al nuevo presidente del Gobierno en función del resultado.
El fin de la campaña electoral estuvo marcado por el asesinato de Isaías carrasco, un ex concejal socialista del País Vasco, que el gobierno y la oposición atribuyen al grupo separatista vasco ETA y llevó a los partidos a suspender sus actos finales de campaña.
En el momento de votar, Rodríguez Zapatero pidió participación masiva en los comicios. "España es más fuerte y la democracia es más fuerte si todos los ciudadanos acudimos a votar", dijo.
Por su parte, Rajoy también al votar manifestó su deseo de "que las cosas se desarrollen como tienen que desarrollarse".
Polarización
La votación es el punto culminante de cuatro años de pulso intenso entre el gobierno y la oposición por varios temas domésticos.
Las principales controversias giraron en torno a la inmigración, la situación económica española, las autonomías regionales y ETA.
España también vive una suerte de "guerra cultural" entre izquierda y derecha por reformas recientes del gobierno socialista en materia social, como habilitar el matrimonio homosexual y facilitar el divorcio.
La aspereza del debate ha contribuido a la polarización de la campaña, que según las encuestas aumentaría a niveles inéditos la representación del PSOE y el PP en el Congreso.
Saludos
Rodrigo González Fernández
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